“Soy muy obsesivo con cada proyecto que encaro, todo lo tomo como un desafío y no puedo ir a medias, me esfuerzo mucho”, confiesa Nicolás Francella, quien está dando pasos firmes en su creciente carrera de actor. Por eso, al momento de elegir sus papeles huye de las zonas de confort: “Mi camino a la hora de trabajar es exigirme”.
Este mes estrena las películas Maracaibo y Los padecientes. En ambas, sus personajes son arriesgados, “son dos grandes experiencias, una peli es la antítesis de la otra; encontré dos colores míos dentro de cada una”.
Asegura que la vocación de actor la encontró mientras rondaba los sets de televisión con su trabajo de productor. “Ir a los canales me despertaba un cosquilleo inexplicable, me fascinaba ese mundo y podía quedarme horas viendo un monitor, pero no me quería dedicar cien por cien esto”. Sin embargo, la actuación ganó y valora cada oportunidad: “En una carrera tan inestable e insegura, hay que aprovechar cada momento. Agradezco la continuidad que vengo teniendo y la suerte de poder elegir los proyectos”.
¿La última película que viste?
La La Land de Damien Chazelle.
¿Una que recomiendes?
Despertares de Penny Marshall.
*Publicado en revista Convivimos. Abril 2017.