Manolo Juárez descansará a la vera del Río Suquía, el lugar elegido por el pianista y compositor para esparcir sus cenizas. La inmortalidad ya la había conseguido con una extensa y valiosa obra musical que deja marcas tanto en el cancionero popular como en la música académica. Murió a los 83 años escuchando Chopin.
Tras su fallecimiento el pasado 25 de julio, su hija Mora concluyó la recuperación de todo su material discográfico, un trabajo que habían empezado juntos, pero que él no llegó a ver. “Mi objetivo fue que él pudiera disfrutarse a él mismo. Él quería que la música sea conocida por las nuevas generaciones, era su motor”, le cuenta Mora a ENREDACCIÓN.
Publicada en www.enredaccion.com.ar, el 11 de noviembre de 2020.