Natalia Garayalde (39) dice que no puede dejar de pensar en el 3 de noviembre de 1995. Tenía doce años cuando las explosiones de la Fábrica Militar de Río Tercero la sorprendieron con una cámara de video en la mano. Con su hermano, la usaban para jugar, pero ese día cambió el tono y se convirtió en la herramienta con la cuál explicarse lo sucedido.
*Publicada el 28 de mayo de 2021 en www.enredaccion.com.ar