A Felipe Pigna le gustaría vivir en la calle Macacha Güemes o en San Martín esquina Belgrano. “Hay direcciones que a uno lo honran”, dice el escritor e historiador que, recientemente, publicó el libro Calles. Se trata de un recorrido por el callejero porteño para acercarse al pasado a través de los personajes que nombra.
“Algunas calles te dan certezas sobre la historia, otras te desconciertan. Por ejemplo, te pierde que el personaje más homenajeado sea Colón, más que San Martín o Sarmiento, quien tiene muchas asociadas”, revela.
En su investigación también descubrió que el 94 por ciento son varones, que hay una gran cantidad de unitarios y pocos federales, y que no hay homenajes a los pueblos originarios, pero sí a sus genocidas. “Esto habla de una lectura parcial de la historia. Es un callejero planteado originalmente en 1893, que desde entonces casi no se ha modificado. Entonces, refleja cierta desidia de restarle importancia a la calle donde vivimos”, afirma. Según Pigna, siempre estamos urgidos por la realidad cotidiana, por eso consideramos que la historia puede esperar. “Es una pena que nos cueste, porque es una disciplina muy útil. Tiene una cosa didáctica y hasta terapéutica de aprender a seguir haciendo lo que nos hace bien como sociedad. Si se recordaran los sucesos históricos, nos ahorraríamos de repetir situaciones dramáticas”.
¿Un libro que recomiendes?
La madre de Frankenstein, de Almudena Grandes.
*Publicado en Revista Convivimos. Septiembre 2023.